Cambio de cable de freno trasero de la bici

Llega el invierno, y la bici empieza a mostrar algún que otro problemilla, oculto durante el buen tiempo. El que más me molesta: el freno trasero. Se queda fijo en la posición de frenar en cuanto aprieto la manilla, y no vuelve a su posición. Hasta ahora he cambiado las pastillas (sabía que no era la causa, pero se habían gastado) y he echado 3 en 1 a todos los cables, sin mejora visible. Hoy me he decidido a cambiar el cable del freno. Para ello, como siempre, me he informado en youtube primero. Después de ver que el chico del vídeo lo tenía listo en 3 minutos, me he liado la manta a la cabeza y me he puesto a ello. Me he encontrado con algunos problemas que el vídeo no cubre, y he pensado en detallarlos aquí, por si alguna vez vuelvo a acometer esta tarea.

Primera desviación con respecto al vídeo:

El cable del chico del vídeo venía ya cortado. Tenía el tope por un lado, el que se inserta en la manilla, y en el otro extremo, nada. Así podía pasarlo por los tubicos sin problema. Mi cable tenía dos topes. Pero no pasa nada, porque en el vídeo también venía cómo el chico quitaba el cable antiguo, y ahí sí tenía que cortar el cable con unos alicates. Pues nada, hago eso.

Segunda desviación:

O mis alicates son un truño, o el chico ése tenía alicates especiales para cortar tuberías de acero. ¡Qué barbaridad! ¡Qué manera de no cortar nada! Yo apretaba y apretaba, pero nada, el cable de freno siempre ganaba. Suerte que una ha estudiado y sabe que las cosas también rompen a fatiga. He agarrado el cable con los alicates y lo he doblado tantas veces que se ha aburrido de resistir y se ha roto.

Tercera desviación:

Al cortar el cable a fatiga, los cablecitos que lo componen no han aguantado juntos. Así, mi cable de partida era como el del vídeo, pero totalmente despeluchado.  Pero una encuentra un arreglo para casi todo, así que lo he vuelto a enrollar con los alicates lo mejor que he podido, hasta que los cablecitos han quedado más o menos juntitos.

Cuarta desviación:

En realidad son todo ramificaciones de la misma desviación. Al meter el cable por el tubito, se me ha ido quedando un cablecito fuera. Volvía atrás, lo intentaba arreglar, y nada. He repetido esta operación unas 50 veces, con éxito, no ya nulo, sino negativo. Después de estas 50 repeticiones y de probar a meter los cables juntos con cinta aislante y algún otro truqui más, he roto el cable rebelde sin querer.

Quinta desviación:

"Bah", he pensado, "igual vienen cables de más. ¿Por qué no desenrollar el cable rebelde roto hasta el principio y cortarlo por lo sano?". Y eso he hecho. Mi cable de freno ahora tiene un cablecito menos.

Y así he conseguido, por fin, sin más desviaciones, pasar el cable tuneado por todos los tubitos y engancharlo en la bici, justo como en el vídeo. Para esto he necesitado unas 2h más que el tipo del vídeo, tengo unas 15 ampollas más de las que él va a tener, y aún ni sé si funciona. Pero me siento súper independiente, que es lo que mola de estas cosas.